Se acabaron los experimentos, se acabo la incursión en nuevos géneros musicales. U2 ya habían tenido su ración de originalidad con Pop, y decidieron echar la vista atrás y recuperar parte de sus raíces junto a Brian Eno y Daniel Lanois, sus productores de toda la vida.

U2 llevaba un tiempo trabajando con Brian y Daniel en Dublin, cuando llego el también productor, Jimmy Iovine. Todavía estaban trabajando en la canción y la letra no estaba finalizada, pero Iovine pudo vislumbrar la potencia de una canción como Beautiful Day, un himno con el que levantarte por la mañana e ir cargandote de energía, tal y como haciamos escuchando algunas de las canciones del primer disco de U2, Boy.

Habían estado trabajando en la canción durante bastante tiempo: ‘Beautiful Day’ comenzó siendo un tema totalmente diferente, y fue Brian Eno, el concienzudo Eno, el que fue probando distintos arreglos hasta encontrar la versión adecuada. Por s parte, Edge consiguió una parte de guitarra que casaba a la perfección, lo que, añadido al excelente bajo de Adam y al ritmo que impuso Larry, hicieron que la canción fuera tomando una nueva forma… ¿La guinda del pastel? La letra de Bono… El grito “It’s a Beautiful Dayyyyyy!’; todo ello mezclado en una jam session de U2…. La magia fue surgiendo poco a poco.

Mientras, Daniel Lanois, sentado en la mesa de mezclas, también comenzó a sentir como la canción tomaba forma.

“La canción en ese momento estaba creciendo” recuerda Lanois “y el mix que estaba haciendo tenia mucha fuerza. No sabias de donde venía, creo que fue un proceso muy largo. Tengo esa imagen grabada de Bono cantando sobre la belleza que encuentras en medio de piezas de metal que sirven para volar”.

“Es como un himno. Creo que esta canción tiene esa raíz. Así que hice un mix que fortaleciera todo eso. El verso no había sido creado todavía, pero sabíamos que teníamos algo especial en el coro. No fue fácil encontrarlo, pero mereció la pena”.

Por supuesto, una de las razones por las que no fue fácil terminar la canción, ni el disco, fue la implicación de Bono en la campaña humanitaria Jubilee 2000. Una distracción más que le impedía estar metido de lleno en la creación del nuevo disco de U2. Sin embargo, los éxitos cosechados por Bono en esta campaña para cancelar la deuda al tercer mundo, hicieron que Bono viera el lado positivo del mundo, fue un ‘Beautiful Day’, un bonito día en el que despertarse… En definitiva, una buena influencia para la canción.

Casi estaba completa, solo faltaba que Edge tomara su guitarra Gibson Explorer de los primeros tiempos de U2, y encontrara el sonido definitivo de guitarra para el tema.

“Como veníamos de crear sonidos innovadores, me sentí con la licencia de usar estos tonos de guitarra” comenta Edge “Fue un punto del que hablamos bastante. Bono no estaba muy seguro de ello. Pero funcionaba”.

Finalmente llego al estudio Steve Lillywhite y le dio el punto final a la canción. U2 tenía el nuevo single de su próximo álbum, All That You Can’t Leave Behind. Lo demás es historia… U2 habían vuelto por sus fueros, y habían conseguido recuperar el tradicional sonido de la banda… ¿Y que mejor manera de comenzar un disco que consiguiendo un single de éxito? Fue un Beautiful Day…